Volvió a rodar el balón en la Nueva Condomina con el inicio de la nueva temporada. Y como cada año en el que se empieza de cero, con renovadas ilusiones. Los murcianistas parten con un objetivo claro, pero complicado en una categoría tan ingrata como la segunda B: el soñado ascenso a la liga de fútbol profesional, de la que fueron tan injustamente apeados hace dos años.
Al menos, la maltratada afición pimentonera ha podido disfrutar este año de una pretemporada sin los disgustos extradeportivos que se han vivido en los anteriores, lo que no es óbice para afirmar que el club sigue en una delicada situación, que la nueva directiva trata salvar con una ampliación de capital aún en tramite y el intento de una gestión mas responsable de la que se irán conociendo más detalles durante el año.
La dirección deportiva del club, en esta ocasión, trabajó desde el final de la pasada temporada en la confección de la plantilla intentando evitar dejar las cosas para última hora como era costumbre, y de este modo, con el colombiano Wilson Cuero, que ha sido el último en unirse al equipo , han ido llegando paulatinamente durante el verano más de 10 fichajes con experiencia en la categoría. Y, si bien es cierto que nada te garantiza el éxito y que se acoplen bien los fichajes, se ha demostrado una apuesta por unas ideas claras y planificadas.
La batuta desde el banquillo la llevará el técnico Paco Garcia, el cual, durante los partidos de pretemporada ha dejado gratas sensaciones con una apuesta de juego vistoso de toque y control que ha generado ilusión por vivir buenos momentos en la Nueva Condomina este año.
Así, para el primer encuentro de la temporada el cuadro grana recibía al Mérida, un poderoso rival de la categoría de bronce entrenado por el exgrana Jose Miguel Campos, con la intención de corroborar esas buenas sensaciones. Y, unas meritorias, para las fechas estivales en que nos encontramos, 4528 almas, decidieron acompañar al equipo animando en el estadio grana.
Paco García presentó un primer once de la temporada formado por Diego Rivas, José Ruiz, Pumar, Golbart, Iru, Sobregrau Titi, Javi Saura, Martín, Cruz y Alarcón, el cual salió en la primera parte bien plantado y con mucha hambre. Así, ya en el minuto 7, consiguió el primer gol. Javi Saura aprovechó un fallo de la zaga extremeña para plantarse ante el portero y definir con gran calidad.
El Mérida, sin embargo, se adueño del balón e intentaba percutir en el campo del Real Murcia, pero los granas se mostraron muy organizados y ejerciendo una efectiva presión que les valió para tirar buenas contras y hacer disfrutar a la afición por momentos.
En el minuto 40, tras un saque de esquina , Golobart consiguió rematar un balón en el área que permitió subir el 2-0 en el marcador y llegar al descanso con una valiosa ventaja.
La segunda parte comenzó de manera fulgurante para los de Paco García con una clarísima ocasión a cargo de Alarcón y un disparo de Golobart que repelió el larguero que pudieron dejar el partido visto para sentencia.
Los extremeños intentaron reaccionar con varias llegadas, pero el conjunto grana tiró de oficio y después de eso supo dormir el partido, y situarse de una manera muy compacta en el campo esperando la contra definitiva que sentenciara. Así, en el tramo final del partido el Mérida volvió a hacer otra intentona con la que encerró a los grana en su campo durante los últimos minutos, pero no fue suficiente.
Los pimentoneros certificaron de este modo su primera vitoria y dejaron buenas sensaciones. Aún es pronto para sacar conclusiones porque, sin duda, en una temporada con tantas jornadas, más unos play-off y cantidad de campos difíciles, hay tiempo para pasar por todo tipo de situaciones, pero el equipo se dejó la sensación de contar con las ideas claras y tener margen de mejora siguiendo por esta línea. Desde aquí eso les deseamos.