Fotografía: Adrián Abellán Nicolás
Tarde de gran ambiente en La Condomina para vivir el primer derbi regional del año en la capital del Segura. El UCAM CF, primer clasificado con 26 puntos, recibía en su feudo a La Hoya-Lorca, decimoséptimo con 12. Debido a estas dispares posiciones en la tabla, cada uno de los dos conjuntos afrontaba el choque con distintos objetivos: los universitarios, con la intención de mantener la ventaja sobre sus perseguidores; los lorquinos, con la esperanza de tomar oxígeno en su carrera por alejarse de la zona baja.
Antes del comienzo del encuentro se guardó un respetuoso minuto de silencio en memoria del muy querido Monseñor Azagra. Una vez decretado el inicio del choque, fue La Hoya el quipo que mostró haber salido al terreno de juego con las ideas más claras. Así, en el minuto 5 Joselu lograba cazar un rechace del portero Escalona tras un duro disparo desde la izquierda del ataque lorquino para marcar el 0-1.
Sin embargo, poco habría de durarle la alegría al valiente equipo lorquino, ya que en el minuto 12 el colegiado señaló un muy discutido penalti de Pina sobre Nono que Góngora se encargaría de transformar en gol merced a un certero disparo con la pierna derecha que entró por el centro de la portería. Con el empate campeando en el marcador, La Hoya no se vino abajo y continuó ejerciendo una dura presión sobre el UCAM en el centro del campo que le permitió disfrutar del dominio territorial y gozar de diversas ocasiones a base, sobre todo, de córners y faltas, para volver a adelantarse en el marcador.
En uno de esos córners botados por el cuadro visitante llegó el más claro error arbitral de la tarde. El hecho sucedió cuando en el minuto 34 un gol legal de Pina fue anulado a causa de un supuesto, pero inexistente, fuera de juego. De esta manera, con la sensación de superioridad de La Hoya-Lorca sobre un poco reconocible UCAM, se llegó al final de los primeros 45 minutos.
Tras el descanso, los papeles no cambiaron y el guión del partido se mantuvo inalterable: era La Hoya el equipo que más apretaba y el que se mostraba con mayor determinación; mientras que el UCAM trataba de zafarse como podía de la presión visitante y de salir cuando podía a la contra. Como justo premio a la descarada actitud del equipo visitante, en el minuto 8 de esta recién estrenada segunda mitad Hugo Rodríguez logró marcar el segundo tanto para los lorquinos de magnífico lanzamiento de falta que se coló en la meta de Escalona tras superar la barrera universitaria.
Con 1-2 en el electrónico al UCAM le tocó apretar los dientes y comenzar a remar a contracorriente para intentar levantar un resultado con el que nadie contaba al principio del partido. Así, a base de empuje y garra, el conjunto universitario comenzó a poner cerco a la portería lorquina hasta que, en el minuto 20, un centro medido desde la derecha del ataque azulón fue cabeceado a gol por Hugo Díaz para hacer subir las tablas por segunda vez al marcador.
Desde el 2-2 y hasta el final del choque, ya fue el conjunto universitario el que llevó la manija del partido gracias a la actuación de un soberbio Titi, que capitaneó cada uno de los ataques universitarios sobre la portería visitante. Así, debido a la mayor ambición del conjunto local en este tramo final, precisamente cuando el partido ya agonizaba, una extraordinaria jugada por la izquierda de Víctor fue finalizada, tras pase de Titi, por el propio Víctor para marcar el tercer gol del partido y darle los tres puntos al UCAM en un final de auténtico infarto que, quizá, castigó excesivamente a La Hoya-Lorca