Muy poca introducción hace falta para dar paso a Shuarma, la voz de Elefantes. Su banda está de gira y lo hace ofreciendo una fiesta en cada uno de sus conciertos para presentar su nuevo disco y para celebrar sus 30 años de carrera musical. El próximo 14 de diciembre harán parada en el Teatro Romea de Murcia.
Para comenzar, con un nuevo disco y una nueva gira, cómo afrontáis esta etapa que arranca, ¿con la confianza que os da vuestra larga trayectoria o con la incertidumbre que produce volver a empezar?
Bueno, a decir verdad, hay un poco de todo. Por una parte, evidentemente, llevamos una carrera detrás y eso no se puede obviar. Tenemos un público que nos sigue, unos medios que nos apoyan. Tenemos una compañía de discos que edita nuestros trabajos, un management que nos consigue conciertos y un conocimiento ya adquirido de la música. Eso es innegable.
Pero, por otra parte, también hay un volver a empezar de cero, porque cada vez que se empieza una gira o se presenta un disco se comienza de cero realmente. Hay canciones nuevas, un show nuevo y nunca sabes si el público te va a recibir de la misma manera. Tú eres distinto también cada día de alguna forma, con lo cual al final es un poco un equilibrio entre los dos enfoques.
Volvéis a la carretera presentando un álbum doble o un vinilo doble, Elefantes, 30 aniversario o Tratado sobre Jardinería, y entre toda esa música que aparece ahí tan solo un tema nuevo, que se llama “Amor”.
Sí, bueno, déjame aclararte una cosa, está en edición CD y en edición vinilo. En CD es un doble CD y un DVD, pero el vinilo es un único vinilo. Lo digo para que la gente no se confunda. Este disco es una recopilación de nuestra carrera. De hecho, es una celebración: estamos celebrando nuestro 30 aniversario, pero también, de alguna manera, sucede que no queríamos quedarnos sencillamente mirando al pasado. No es una revisión para quedarnos anclados en el pasado, al contrario, es una revisión para que nos proyecte hacia adelante.
Por eso, creíamos que teníamos que poner una canción nueva que mostrara también hacia dónde nos estamos dirigiendo, y por eso esta canción, que se llama “Este amor”. La canción dice: “Este amor va a creciendo”, y ese es un poco el sentimiento que tenemos nosotros después de 30 años: que cada vez las cosas nos van mejor, que vamos a más. Nuestra familia crece, nuestro público crece, la sensación de amor crece. Así que, bueno, eso es lo que tratamos de describir en la canción.
La edición CD incorpora el DVD de vuestra actuación en el festival Sonorama, “Elefantes y amigos”, un concierto con un montón de gente que cantó con vosotros demostrando ese amor que os tienen.
Sí, el DVD lleva dos piezas: una es el concierto del Sonorama, como tú dices, que es “Elefantes y amigos”, dónde está Gabriel, de Shinova; Noni, de los Lori Meyers; Alberttinni, Rozalén, Viva Suecia, Benjamín Prado, Sandra de Merino… Fue una noche muy especial, muy bonita, muy emocionante y así ha quedado registrada. La otra pieza del DVD es un documental que habla un poco de todos estos invitados y de la relación que tienen con nosotros, y a través de ellos se descubre un poco lo que es Elefantes.
Hablabas de esta carrera musical de 30 años, en ella ha habido cambios de formación, paréntesis… Han sucedido muchas cosas en ese tiempo. No habéis sido una banda inmersa en el clásico disco-gira continuamente, sino que habéis pasado por muchos procesos.
Es que en 30 años te puede pasar de todo. A nosotros nos ha ocurrido de todo. Absolutamente de todo. Y, bueno, pues uno va capeando las cosas: las que son buenas son muy fáciles de sobrellevar, las malas son un poco más difíciles, son un poco más incómodas. Pero, al final, esto es la vida. Nuestra forma de vivir es a través de la música, a través de Elefantes, con lo cual es normal que nos haya sucedido de todo, pero al final a veces en la vida no es tanto lo que te sucede, sino cómo recibes lo que te sucede. Así que nosotros tenemos la sensación de que tanto lo bueno como lo malo que nos ha sucedido nos ha transformado en lo que somos a día de hoy. No sé si lo hacemos mejor o peor, pero nosotros estamos orgullosos de lo que somos y de lo que hacemos. Nos sentimos muy afortunados. Así que aquí estamos de celebración, cargados de orgullo y de agradecimiento.
Sobre la carrera de Elefantes se ha dicho que sois coherentes, que sois una rara avis dentro de la música: ajenos a todo, que sois únicos. ¿En qué momento de esa carrera se encuentra ahora mismo la banda?
Te voy a hablar desde la más profunda sinceridad: nosotros tenemos la sensación de que lo mejor de la banda va a venir a partir de ahora, o que lo estamos cocinando ya. Esta celebración ya es algo así. Esto no va de llegar a ningún sitio: es un recorrido. Es un camino y a medida que van pasando años, van transcurriendo equivocaciones, vivencias, malos y buenos momentos. Todo eso nos va definiendo como personas y todo eso enriquece nuestra música. Al final es así, las experiencias nos enriquecen de alguna manera y creo que ahora también con la llegada de Álex, el nuevo guitarrista. Todo se ha movido y, afortunadamente, se ha movido a mejor.
Ahora mismo hay una relación interna en la banda muy peculiar que nos está haciendo florecer individualmente a cada uno a muchos niveles, y todo esto se tiene que notar en la música. De hecho, hay mucha gente que nos ve en directo ahora y nos dice: “¡Guau! teníais un buen directo, pero es que el de ahora es demoledor”. Y así nos sentimos nosotros también, no porque sea mejor o sea peor, sino porque creo que estamos mucho más en contacto con nosotros mismos, mucho más relajados, y eso te permite transmitir mejor quién eres. Creo que ahora vienen los mejores años de Elefantes.
Las canciones de Elefantes, excepto alguna oscura, como “Clavos”, generan positivismo. Me imagino que no lo haréis pensando, vamos a hacer canciones positivas, sino que vivís en esa pompa de positivismo, que tanta falta hace también.
Bueno, yo no sé si es de positivismo. No lo sé. Creo que es más de realidad porque también hay muchas canciones que hablan de lo duro que es vivir, pero siempre mantienen un tono de esperanza. Supongo que es porque nos definen. Nosotros somos gente, como te decía, muy afortunada y tenemos una vida maravillosa. Con mucha lucha, sí, pero al final vamos recibiendo resultados; con lo cual, es normal que en nuestras canciones exista esa mirada de esperanza.
Pero bueno, sea de un modo u otro, al final nuestras canciones nos definen. Si transmitimos eso, pues al final ese debe de ser nuestro sentir. A mí me resulta muy difícil definir cómo somos. Pero, es verdad que el amor es una constante en nuestras canciones. Sin embargo, creo que todas las canciones son de amor, todas, porque la vida es amor, y ese sentimiento lo puedes contar de una manera o de otra, desde una perspectiva o desde otra, pero al final el amor es algo que está en todo. El ser humano es amor y por eso tiene una relación muy profunda con él.
Ahora, que hablas del amor, me viene a la cabeza una banda conocida por reiterarse mucho en el tratamiento del amor: Maná. De hecho, se dice que a los mejicanos Maná si les quitas la palabra amor de sus canciones, se quedan sin repertorio. Que utilizan mucho esa palabra, ese referente…
Ja, ja, ja.
Por otro lado, a ver si tú, como artista, me puedes decir por qué los músicos siempre hacéis canciones de amor solo a las parejas. ¿Tan difícil es hacer canciones a familiares, padres, hijos…? ¿Por qué cuesta ese trabajo abrir la mirada?
Bueno, yo no sé los demás. Yo puedo responderte por mí. Pero, a lo mejor hay canciones mías que tú has creído que son para una pareja cuando, en realidad, en ellas yo no estoy hablando de una pareja. De hecho, hay muchas canciones que he escrito a amigos, a familiares, incluso a mí mismo -a la relación conmigo mismo-; porque, al final, el amor no se da únicamente con una pareja. Desde mi punto de vista, el amor lo inunda todo.
Una relación de amistad es una relación de amor. Sin embargo, cuando escuchamos una canción a veces sobreentendemos que se está hablando de una pareja porque, probablemente, ese es el punto que todos deseamos: una bonita relación de amor de pareja con alguien. Pero, estoy seguro de que en el caso de esas canciones de otros artistas que tú piensas que son de amor de pareja, si nos contaran realmente de qué tipo de amor hablaban, en muchas nos sorprenderíamos.
Para finalizar, imaginemos que hacemos un viaje en el tiempo y que avanzamos otros 30 años más, que alguien coge vuestra discografía, empieza a leer el nombre de los discos (El hombre pez, Azul, Elefantes, La forma de tus manos, Somos nubes blancas, Tratado sobre jardinería...) y pone vuestra música. ¿Qué es lo que más podría llamarle la atención?
A mí me gustaría pensar que lo más importante, lo que más nos define, ni siquiera es la música, sino que es más la emoción que hay detrás de la música. Es decir, ¿qué temas tratamos? ¿De qué manera? ¿Cómo los instrumentamos? Lo que transmitimos. Me gusta pensar que eso es lo que define a un grupo. No tanto las canciones o sus arreglos; al final esas son cosas que te dan pistas y que son un embudo que te lleva a la esencia de todo, pero creo que lo que lo que define a una banda es su emoción.
Nosotros, por lo menos, somos muy conscientes de ello. Trabajamos mucho con las emociones y a veces cuando empezamos a elaborar una canción lo primero que buscamos es qué emoción nos provoca y, partir de ahí, lo vamos transformando en música. Pero, ¿qué queremos transmitir con esa canción? ¿De qué estamos hablando?... Al final creo que eso es lo que más define a una banda.
En cualquiera de sus dos ediciones (CD y Vinilo) el nuevo disco de Elefantes, 30 aniversario, está disponible en su web, ELEFANTES.NET
Las entradas del concierto de Elefantes del 14 de diciembre en el Teatro Romea pueden adquirise en su punto oficial de venta haciendo click AQUÍ.