El artista Nacho Para nos ofrece Concierto para George, un libro que habla de aquel concierto homenaje a George Harrison realizado en Londres en 2002. Pero no se queda ahí, sino que también deja sitio para un material inédito que engancha y sorprende de igual manera. Para entender mejor Concierto para George me pongo en contacto con él.
¿Cómo nace la idea de llevar el concierto a un libro?
Desde que cubrí el concierto en noviembre de 2002 me quedé con la sensación de que tenía mucho material que no había cabido en las tres crónicas que envié desde Londres y que se publicaron en El Periódico de Cataluña. El tiempo fue pasando, dejé el periodismo, empecé con Bantastic Fand y fue la editorial Lenoir la que, en plena pandemia, me sugirió que trabajara ese material inédito y diera forma al libro. Encontré las libretas donde tenía todo apuntado y, aunque habían pasado veinte años, las sensaciones las llevaba adheridas a la piel.
¿Qué va a encontrar el lector en Concierto para George?
Creo que una forma distinta de acercarse a un personaje tan interesante, poliédrico e inspirador como George Harrison, con mucha menos literatura escrita que Lennon o McCartney. El concierto de homenaje a su figura el hilo conductor del relato, pero no se queda en la crónica de un concierto, sino que abre la mirada a todas las músicas y filosofías que marcaron el crecimiento personal de Harrison. El libro es tan abierto como la propia mirada de Harrison al mundo.
¿Recomendarías éste libro a todos los amantes de la música o solamente para fans de los Beatles?
Creo que es un libro interesante para cualquier persona con un mínimo de curiosidad. Harrison es el beatle para quienes desconfían de los Beatles, pues fue el primero que logró tomar una sana distancia sobre el fenómeno planetario y agobiante que supuso la beatlemanía. Pero al mismo tiempo es un beatle con todas las de la ley, nunca dejó de serlo, y su aportación al grupo es vital y muy reivindicable. Adentrarse en el mundo de George Harrison supone revisar un repertorio que abarca desde la música británica anterior a la primera guerra mundial, el blues y el rock'n'roll americano y la incorporación de músicas más exóticas de India y Hawái. Es un libro para amantes de la música en general y para todo aquel que intenta buscar un sentido a la vida que no pase por la mera búsqueda de la fama y el éxito. Aparte de músico, George es un ser humano apasionante.
Figuras como Eric Clapton, Tom Hanks, Terry Guilliam, Monthy Python entre muchos otros acudieron al homenaje, ¿qué tenía George para inspirar a grandes músicos e influir en el mundo del cine y el espectáculo?
Tenía una curiosidad inagotable y un alto sentido de la amistad. Era leal y nunca se metía en las cosas por esnobismo, sino hasta el fondo y con todas las consecuencias. La vida de Brian se hizo porque los Python estaban en apuros y él quería ver esa película terminada. Así que soltó toda la pasta y se pudo hacer. ¿Cómo no lo van a querer los Python?
¿Cómo fue la relación de George con el resto de los beatles después de abandonar la banda?
Bueno, se ha escrito mucho sobre eso y no creo que las crónicas más sensacionalistas reflejen la verdad. Los cuatro beatles eran hermanos y aunque pasaron muchas cosas y a veces se distanciaron, no dejaron nunca de ser hermanos. Cuando murió Lennon, ambos estaban algo distanciados. Pero es algo que se hubiera arreglado con el tiempo, si John no hubiera sido asesinado. Con Paul había una distancia musical, de concepto artístico, pero en lo personal la relación era estupenda. George murió agarrando la mano de Paul. Y con Ringo nunca hubo ningún problema serio. George lo protegió siempre.
¿Crees que las amistades de George fueron parte importante tanto de su carrera como de su filosofía de vida?
Fueron lo único importante. Si le gustaba tocar era para pasárselo bien con sus amigos. Nunca tuvo la idea de mantener un pulso con el estrellato, como sí le ha ocurrido a McCartney. Jardín, ukelele y amigos. Ese era su lema para intentar conseguir ese concepto tan inalcanzable llamado felicidad.
Para ti ¿fue el beatle más auténtico y quizás el más infravalorado?
Más auténtico no creo... Al menos como beatle... Quiero decir que todos los Beatles eran auténticos. Como persona, George no era un tipo fácil. Era piscis, muy dual y contradictorio. Pero lo que sí está claro es que buscaba en su vida cosas verdaderas, cosas que le llenaran... Buscaba amigos de verdad, huía de los aduladores. Transitaba entre el misticismo hindú y el circo de la Fórmula 1, eso da idea de sus extremos... Que estuviera algo infravalorado al principio era normal, porque creció a la sombra de los talentos de Lennon y McCartney, que despegaron mucho antes que el suyo... Pero su aportación a los Beatles es mayor de lo que se pueda imaginar... Fue el primero en visitar EEUU, fue el primero en incorporar la guitarra de 12 cuerdas que vio en los Byrds, fue el primero que tomó LSD junto a Lennon, fue el primero que incorporó el sitar y la música hindú al pop occidental, fue el valedor de Billy Preston en las sesiones de “Let it be”, fue el primero de la historia en hacer un disco de música electrónica, fue el primero en organizar un concierto benéfico de rock...
¿Por qué esa definición del “beatle tranquilo”?
Porque de todas esas cosas que él hacía no le gustaba sacar pecho. Había otros gallos en el corral que eso lo hacían mejor. Y quizá porque fue el primero en renegar del circo mediático y el primero que se negó a seguir haciendo giras donde la música era lo de menos, porque ni se oían...Siempre buscó algo más...
¿Qué sentiste al ser uno de los 5.800 invitados al evento?
Una gran emoción. Lo viví como un premio a treinta años de periodismo persiguiendo entrevistar a un beatle. No lo conseguí con George, pero sí con Paul. Fue una noche muy especial, el mejor concierto al que haya asistido nunca. La atmósfera que se creó no la he visto en ningún otro lugar ni circunstancia. Ravi Shankar dijo que George estaba allí esa noche y la verdad es que todos sentimos que estaba. Hubo una energía sobrecogedora.
El libro está repleto de anécdotas, ¿podrías adelantarnos alguna que recuerdes con especial cariño?
Tres momentos permanecen imborrables en mi memoria. Ver a George Martin entrar en el Albert Hall cuando aún estaba vacío y quedarse allí solo, mirando el gran retrato de George. Ver a Tom Petty mirando al techo mientras cantaba “I need you” como si esperara que su amigo apareciera allí arriba. Y escuchar la hondura con la que Paul McCartney, en la interpretación más recogida y respetuosa de su carrera, cantó “All things must pass”. Muchas más cosas, pero para eso es mejor leer el libro...
Entonces, creo que es el momento perfecto para que recuerdes dónde y cómo conseguir un ejemplar de Concierto para George.
Je, je, je, cierto. Pues, hasta finales de año estoy haciendo una promo que consiste en enviar el libro firmado y dedicado a quien esté interesado y me escriba por privado. Se puede hacer a través de Nacho Para en Facebook e Instagram o a través mi correo electrónico.
¿Alguna ausencia que merezca la pena destacar en el homenaje?
Dylan, claro. Imposible saber la razón exacta por la que no acudió. Pero, dos semanas ante en el Madison Square Garden de Nueva York, le dedicó a George una maravillosa versión de “Something”. Nunca antes y nunca después Dylan ha cantado en directo ninguna otra canción de los Beatles. Respeto máximo.
Decides abandonar el periodismo por la música ¿qué te lleva a tomar esta decisión?
No sé si abandoné el periodismo o fue el periodismo el que se abandonó a sí mismo, ja, ja... En fin, no sé, dejaron de darse las circunstancias para el periodismo tan libre que pude practicar entre 1983 y 2011... La música siempre había estado en la recámara, siempre tuve grupos y siempre compuse canciones. Lo único que hice fue profesionalizar una vieja afición.
Bantastic Fand es tu banda, ¿cómo suena?
Bueno, suena a muchas cosas, pero todo pasado por el desierto de Almería y el campo de Cartagena. Nos etiquetan a menudo en el término “americana”, pero hay mucho más en la coctelera. El pop británico está muy presente, la música africana también. Hay retazos de blues, de soul, de country, de folk, de góspel... Es difícil autodefinirse. Buscamos hacer canciones que nos gusten y nos representen, independientemente del material con que estén hechas.
¿Encontramos influencias de George Harrison en vuestra música?
Sin duda Harrison corretea por ahí en algunas canciones. “You”, por ejemplo, de nuestro último disco, está basada en una progresión de acordes muy harrisonianos. También la canción que da título a ese último trabajo, “Somebody's world”, tiene algo de Harrison y Lennon en su esencia.