Ganas de pasarlo bien y que su público también lo pase bien. Ese es un elemento básico dentro del universo de los lorquinos Trepacerros. No te los pierdas en directo, porque te arrepentirás.
Trepacerros nació hace algo más de un año.
No exactamente, Trepacerros nació Entre Paco Salinas, José Damián (Perdines), Ricardo Lario y José Ángel Carrillo (Mochuelo) allá por mediados del 2019, a modo acústico, pero en 2020, debido a la pandemia Víctor G. Caro y José Antonio Hernández (Django) se vinieron a trabajar a las highlands (como les decimos a las tierras altas de Lorca) y tras las jornadas de poda cogíamos los instrumentos y disfrutábamos un rato sin tener el serrucho entre las manos. Ya con la banda estrenada, Víctor no podía tocar en algunos conciertos y fue a finales de 2022 cuando entró Josico Vargas (El Peseta) a repartir palos.
La banda no tiene demasiado tiempo de vida, aunque ya habéis dado un buen número de conciertos ¿cómo lo habéis logrado?
Con perseverancia y el “boca a boca” sobre todo. Creemos que es una mezcla entre la peculiaridad de nuestros temas y un hartazgo del público ante la oferta constante de las mismas canciones versionadas una y otra vez. Nuestros directos tienen más de Trepacerros que de versiones. Hemos apostado por nuestra música y lo que somos, con la suerte de que a la gente le gusta y la disfruta. Lo único que nos ha confirmado nuestra experiencia es que quien nos ve, mínimo nos recuerda una miaja.
Sois un grupo cuyo fuerte es el directo. Sin olvidar el estudio de grabación, eso sí ¿estáis preparando álbum?
Ahora mismo estamos inmersos en la grabación de nuestro primer EP. Tenemos un par de vídeos subidos en nuestro canal de Youtube, pero nuestra intención es empezar a grabar todos esos temas que hemos mencionado. No tenemos fecha prevista de lanzamiento, ya que como todo proyecto autogestionado requiere de tiempo para su consecución.
¿Buena experiencia, la de grabar vuestro primer trabajo?
Fue una experiencia increíble todo el proceso de grabación de los vídeos de Youtube. Ese final de enero fueron diez días intensos, agotadores y cargados de nuevos aprendizajes para todos. Hay que pensar que eran finales de la pandemia, nosotros estábamos trabajando en el campo como cuadrilla de jornaleros podando almendros y en los ratos libres nos íbamos a casa de Víctor a improvisar y chapurrear los temas que teníamos en el acústico. Partíamos de cero, sólo teníamos letras sueltas, un puñao de acordes y los conocimientos de un batería loco, ja, ja, ja. Gracias al trabajo de Víctor (baterista), Paco (clarinete y letras) y Mochuelo (violín y guitarra) empezamos a coordinar y ordenar todo ese batiburrillo de letras y riffs hasta conseguir darles forma. Cuatro días más tarde se incorporaron Richi (guitarra y bajo) y Django (guitarra, bajo y banjo). La energía que de allí emanaba era increíble, de diez a catorce horas diarias de trabajo grupal, y así, en tan solo semana y media pudimos dar forma a nuestros primeros siete temas.
En ese momento, en cuanto sacamos los temas del horno, nos enzarzamos en una grabación en directo en exterior. Toda una hazaña para nosotros, ya que, el 80% de la banda no había visto un micro en su vida. Si acaso, el micro que usa el cura en la iglesia. En ese estado nos metimos en el corral y nos pusimos a grabar. Pensad que, a excepción de Víctor, no teníamos experiencia a la hora de tocar en grupo, solo teníamos ganas de grabar los primeros temas de los Trepacerros. A nuestra ayuda apareció Francis G. Caro (nuestro jefe artístico y técnico de sonido) quien hizo de cámara. En ese momento, como por arte de magia, apareció Elena Rueda (diseñadora gráfica) con el logo Trepacerros. Toda una concatenación de sucesos y de personas que desembocan en lo que somos hoy.
Volviendo a vuestros shows en vivo, sobre el escenario sois más de media docena de músicos ¿Quién pone orden entre tanta gente?
¿Orden? Vamos a denominarlo “anarquía consensuada”, ja, ja, ja. Pero, a grandes rasgos y a base de ensayos y tiempo juntos. Esto es un grupo, es un organismo vivo. Por lo tanto, todas las partes aportan su grano de arena. Por ejemplo, a la hora de crear los temas, Paco viene con las letras, a Mochuelo siempre se le ocurre algún riff o línea sobre la que partir, o Django viene con una línea de bajo que pide a gritos una banda con la que hacerse sonar. La verdad es que, son más las personas que lo conforman, todos vamos en busca de lo mismo, de ese sonido grooveante que te hace “picar panizo” (como llamamos a menear la cabeza), ja, ja, ja.
Además, según la canción vais cambiando de instrumentos. ¿Cuánto habéis tardado en conseguir esa coordinación? (Para no tardar en los conciertos demasiado tiempo en ese cambio).
Ha sido práctica. Ya os decimos que al principio no fue fácil, pero nos ayudamos de nuestros temas y lo que somos. Somos conscientes de que nuestras canciones se disfrutan más contextualizadas, hay que pensar que al hablar de nuestras vidas y vivencias en "las highlands" una breve explicación pone al público más en sintonía. Ayudándonos de esta circunstancia, generamos el margen para realizar un cambio de instrumentos fluido.
Hoy, viernes 17 visitáis a las 22:00h la sala Revólver en Murcia. ¿Qué se va a encontrar el público que vaya a veros?
Jarrete en estado puro. Letras más underground que un boniato, cargadas de ácida sátira al más puro estilo cortijero y bien rebozadas en ritmos funky, folk, hip-hop y country entre otros, rematadas con un aliño de folclore regional. Lo que vienen siendo unas buenas migas con sus tropezones, vamos.
Y, a ver, para quienes tengan ganas de más música de Trepaceros, ¿tenéis conciertos próximos? ¿Cómo os pueden escuchar en Internet?
Pues tenemos un concierto el 6 de diciembre en las fiestas de Avilés (Lorca). Y se nos puede encontrar en Instagram: @Trepacerros_sl y en nuestro canal de Youtube: @Trepacerros_sl y el que quiera ponerse en contacto con nosotros DM a Instagram o un correo a trepamusic@gmail.com.