Partido interesante el que se presentaba en la Nueva Condomina. En un buen horario que escogía para esta jornada la tarde del sábado, y ante un rival de la zona noble de la tabla que lucha por meterse en el play-off como el Compostela del ex-entrenador grana Iñaki Alonso, quien al inicio del encuentro fue objeto de un respetuoso aplauso que recordaba su protagonismo en el último ascenso del equipo a segunda división y su permanencia en la misma en la temporada siguiente.
Sólo el día nublado era lo único que podía hacer menos apacible el acudir al campo. Aún así, y con la lluvia acompañando diferentes fases del partido, el coliseo grana registró una entrada de unos 5600 murcianistas, demostrando una vez más la inquebrantable fidelidad de esta meritoria afición. Los pimentoneros buscaban mantener su buena racha de resultados y poder permanecer al acecho del liderato del Real Oviedo hasta ese encuentro en la cumbre que tendrá lugar cuando los asturianos visiten la Nueva Condomina dentro de tan solo dos semanas. Pero el equipo, en esta ocasión, no pudo dar esa merecida alegría a los aficionados, a pesar de haberlo dejado todo en el campo.
El partido lo comenzó el conjunto grana con una gran intensidad. Ya en el minuto uno Isi disfrutó de una gran ocasión tras un pase proveniente de una gran jugada de desborde de Javi Flores por banda. Así mismo, el punta Carlos Álvarez se mostró muy activo en ataque en esos primeros compases. El dominio del Murcia se vio recompensado en el minuto 15 con una jugada muy similar a la que abrió el partido entre Javi Flores e Isi que esta vez el ciezano sí consiguió enviar a las mallas colocando un merecido 1-0 en el marcador.
El Murcia continuó bien plantado pero en esos momentos el Compostela ya empezaba a estirarse e intentar percutir más, abriendo una fase sin un dominador claro que se terminó en el minuto 32, con una jugada del Compostela en la que consiguió empatar en la primera ocasión realmente clara que disfrutaron los gallegos, por medio de Yacine tras un rechace dentro del área. El mazazo del empate enfrió a los granas, que se vieron más menguados físicamente y desubicados, pidiendo llegar al descanso para recomponerse, el Compostela pareció conforme con la situación y entre pocas ocasiones y un dominio incierto del partido terminaban los primeros 45 minutos.
La segunda mitad la inició el Compostela dando un paso adelante y dominando el partido. Sin embargo un Murcia bien plantado evitaba claras ocasiones a la par que en jugadas aisladas conseguía atacar la defensa compostelana con peligro, lideradas, sobre todo, por un destacado Javi Flores, que en estado de gracia ofreció la jugada del partido yéndose de tres defensas en el área y estando a punto de batir al guardameta. El incombustible Acciari logró un gol rematando un centro de Jairo que fue anulado por fuera de juego. No hubo un dominador claro hasta la fase final del partido, en la que los murcianistas se lanzaron arriba a dar el todo por el todo y arrinconaron a los gallegos con un acoso total al área rival. Disfrutaron de varias ocasiones entre Javi Flores, Carlos Alvarez y varios balones colgados con peligro, pero la fortuna esta vez no estuvo del lado grana y se llegó al final del encuentro con ese amargo 1-1 en el electrónico.
La victoria del Oviedo ante el Lealtad, cuyo final coincidió con el del encuentro de la Nueva Condomina, coloca a los granas a 7 puntos, pero aun queda mucha liga y un partido contra el líder en dos semanas. Manteniendo la actitud y cohesión en el equipo no se puede dar nada por perdido. Pese al mal sabor del empate en buena parte de la afición quedó la sensación de que, pese a tener fases más bajas, el equipo dio un buen tono físico, gran entrega y cohesión.