En estas fechas que estamos -de fin de curso para los estudiantes y preveraniegas en Murcia- la Ciudad, como cada año, dentro de unos días verá desplazar buena parte de su actividad hacia las costas. Por eso, siempre es agradable disfrutar, aún que podemos, de una de las últimas noches festivas de jueves hasta que en septiembre se vuelva a reiniciar el curso.
Así, llegados a estas fechas, y con motivo del fin del curso, la UCAM organizó un concierto muy interesante con algunos de los grupos murcianos más en boga en la centrica Sala REM. Todo a modo de fiesta final de curso, sí, pero también con unos objetivos benéficos, siendo la entrada a cambio de la donación de alimentos destinados a Cáritas para contribuir de esa forma con la loable labor que realiza esta entidad en estos tiempos tan difíciles para muchos. Por otro lado, si a eso le añadimos el anuncio que se hizo el día anterior sobre quien sería el artista invitado sorpresa para el concierto: nada menos que El Pescao, todos podrán comprender que se nos hiciera imposible abstenernos de asistir a un espectáculo con tantos alicientes.
Y es que el cartel era de lo más interesante y variado: un buen puñado de los mejores grupos murcianos emergentes escogidos con estilos muy diferentes. Justo cuando llegamos a la Sala REM, ya estaban empezando El Kamión de la basura, los cuales ofrecieron un concierto muy animado gracias a su estilo que mezcla con maestría ritmos latinos con un toque funk, y una rica instrumentación en la que se destacaba el dominio de las percusiones y la trompeta, en lo que fue una aclamada actuación.
Más tarde hicieron acto de presencia sobre las tablas Sin Propiedad, un grupo que puso la rumba a la noche. Bebiendo de esa arraigada tradición rumba-pop que ha evolucionado hasta nombres actuales como Estopa o Melendi demostraron un gran repertorio con temas pegadizos que hicieron moverse al respetable, además de un gran simpatía y sentimiento sobre el escenario, y unas muy buenas voces.
Posteriormente fue el turno para el rock de la mano de The Meatpies y The Purple Elephants, dos grupos de los que ya hemos dado testimonio en anteriores artículos y que, a pesar de que por el formato del concierto, les acabó quedando un tiempo muy reducido para sus actuaciones., no sejaron de mostrar su talento y demostrar que siguen ambos en su línea ascendente. Es decir, unos Meatpies con su gran poderío musical, dejando siempre con ganas de más. Y, por su parte, unos “Elefantes”, con cambio de look rubio platino de Jorge incluido, que acreditaron, una vez más su actitud, su gran actitud y su buen estado de forma de cara a la final del Creamurcia que disputarán este mismo fin de semana.
Así, se llegó al momento fuerte de la noche con la salida de David Otero, más conocido como El Pescao, a lo alto del escenario. El ex-Canto del loco, con la banda en formato trío, guitarra, bajo y batería, dio un gran recital en el que no faltaron temas de su último disco como Al otro lado del mar o Azul y blanco; anteriores éxitos como la estupenda versión que realizó de Castillo de arena; o clásicos como Volverá, de la época de El canto del loco. Sin duda, supo combinar hábilmente la alternancia de baladas con la guitarra acústica y la “caña” de la eléctrica con otros temas para hacer saltar a un público entregado, para finalizar por todo lo alto con Buscando el sol y poner así el colofón a lo que fue una gran noche de despedida al curso universitario y de bienvenida al verano.