Dinosaurio es una palabra que, referida a una persona, suele encerrar un sentido más bien peyorativo. No en vano, dejando de lado a los reptiles fósiles del Mesozoico, que no se han metido con nadie, la segunda acepción del diccionario de la RAE para este término avisa, “despectivo”, antes de rezar: “Persona veterana y de relevancia en el pasado, pero anticuada en la actualidad”.
Entonces, la cosa parece clara: veterano-pasado-anticuado. El problema viene cuando uno, al quitarse la venda generacional que lo acompaña desde la infancia y tomar conciencia de sí mismo en relación con el mundo y con individuos de edades muy distintas fuera del ámbito familiar, descubre que las cosas no siempre son tan claras. Es decir, que no siempre los veteranos del pasado son anticuados ni tampoco los jóvenes del presente, necesariamente modernos.
De hecho, sobre el tema que nos ocupa, que es el de la música popular, al echar la vista atrás y observar la secuencia temporal desde la década de los 50 hasta nuestros días, resulta difícil encontrar en España una generación más moderna, audaz y revolucionaria que la de los jóvenes de los años 60, ya que, todavía bajo una dictadura, se atrevieron a romper con los ritmos canónicos de la copla, el pasodoble, el flamenco o el bolero para poner en sintonía a nuestro país -con puntualidad y sin retraso- con la vanguardia musical, que se expresaba fuera de nuestras fronteras a ritmo de pop y de rock, y, además, a poner en marcha una industria de radiofórmulas, lanzamientos de discos, promociones, conciertos y giras que sigue plenamente vigente a día de hoy.
Por eso, no es de extrañar que, sabiéndose los más modernos de la modernidad, seis grupos de esa década hayan decidido aceptar el calificativo que los habría de sentenciar, dinosaurios, para, haciendo bandera de él, emplearlo para bautizar el primer festival de música de los años 60 y 70, que tendrá lugar en el murciano barrio de San Pio X, y dar, de esa forma, toda una lección de carácter, personalidad y buen humor de la que bien haría en tomar nota nuestra querida sociedad actual, tan tendente al complejo, el trauma y el hondo resentimiento… Como diría Leslie: “Que se mueran los feos”.
Así, este viernes 28 de junio y a partir de las 19:00h en la plaza de San Pio X, los legendarios Rusadir, Los Brujos, Copacabana, Los Jawhars, Music Men y Flash Trío se subirán al escenario -puede que con algún achaque de la edad, pero siempre jóvenes y modernos- para tomar las guitarras eléctricas una vez más y celebrar el milagro musical del que fueron partícipes en aquella prodigiosa década de los 60, y del que aún hoy tienen mucho que mostrar y enseñar a aquellos que -sin prejuicios ni complejos- sepan aprovechar una oportunidad de oro cuando se les ofrece la ocasión.