Entrevista a Pepe Belló: "Escribo para disfrutarme"
La poesía surge de la mente de los creadores como necesidad o como forma de mostrar al mundo lo que siente y lo que le sucede. Hay tantas razones como tipos de poemas. Tantos poemarios arrinconados en estanterías polvorientas como seudopoetas que se creen el centro del universo creativo. Pero el caso que me he descubierto es diferente. En esta ocasión pongo rumbo a Cieza para encontrarme en la tierra natal del entrevistado. Él es Pepe Belló, poeta y creador de un espacio único. Acaba de publicar su último tomo de poemas "Agujas" (Editorial Pluma Verde, 2017) y por eso es una buena oportunidad para charlar e intentar entenderle.
Bueno Pepe, primer libro publicado ¿qué sientes?
Que ya he realizado el sueño de mi vida. Tengo que empezar a buscar otro libro dentro de mí.
Belló utiliza en sus recitales un muñeco de vudú (como el que aparece en la portada) y a cada poema recitado le va clavando agujas. Has dicho que tus poemas son tus agujas ¿tanto te duelen?
Unos cuantos sí, pero curan. Las agujas tienen más de metáfora a través del vudú, que tengan una incidencia en mí y ojalá en cualquiera de mis lectores.
Sobre el trabajo o la labor del poeta sigo teniendo una duda ¿escribes por necesidad o por puro negocio?
Muchas veces por necesidad, pero otras, casi la mayoría, son por puro disfrute.
Los poemas de "Agujas" huelen a amor, a desamor y a catarsis personal ¿qué más hay en tus poesías?
El libro es una evolución personal, una necesidad de encontrar el camino para salir del desamor.
De escribir para ti a ser publicado ¿hay mucho cambio de actitud a la hora de enfrentarte al papel en blanco?
Para nada, incluso ahora escribo más para mí. Casi siempre lo hago para disfrutarme. Escribo para disfrutarme.
¿Qué planes tienes en la literatura?
Seguir disfrutando con ella. Que me deje seguir disfrutándola, es lo que más me alumbra los días.
Y para terminar ¿cómo ves el mundo poético en la Región de Murcia?
Veo un despegue bastante interesante. Mucha gente se siente en confianza al proliferar los espacios para intercambiar arte.
