En otro partido jugado de poder a poder, el UCAM CF, que comenzó perdiendo casi desde el inicio por un gol en propia puerta de su defensa central, Fran Pérez, a pesar de que lo intentó de todas las formas y maneras posibles, sólo pudo empatar ya en el minuto 25 de la segunda mitad por mediación de Jona, que había salido minutos antes al terreno de juego sustituyendo a Guichón.
Así, en una jornada que se preveía de fiesta en el estadio de La Condomina debido a la presencia de miles de aficionados llegados de Elche que, junto con los de Murcia, iban a teñir de colorido y buen ambiente sus renovadas gradas, azulones y franjiverdes comenzarían el choque a las 18:00h bajo un sol de justicia y viendo a la fortuna jugando a favor de los visitantes cuando, en el minuto 10, el Elche, que apenas se habia aproximado por la meta de Biel Rivas, se adelantó en el marcador merced a una jugada desgraciada en la que Fran Pérez acabó introduciendo de forma involuntaria el esférico en su portería.
Desde entonces, con los universitarios debiendo remar a contracorriente casi desde el inicio, éstos, lejos de venirse abajo, una vez más volverían a sacar la casta de equipo serio y luchador para sobreponerse a la situación y tratar de reaccionar al golpe recibido. De esta forma, aunque los locales no ejecutaron un fútbol de altos vuelos, sí es cierto que pondrían cerco a la portería visitante mediante los sucesivos remates de Natalio, Imaz, Guichón, y César Remón que, sin embargo, no hallaron porteria.
Más adelante y hasta el descanso, sería el Elche CF el que se encontraría más cómodo sobre el terreno de juego y el que conseguiría ejercer un dominio más claro sobre su rival. Dominio que se asentaría y se ampliaría ya en el inicio de la segunda mitad, cuando los franjiverdes parecieron introducir a los azulones en un inmenso rondo en el que éstos no eran capaces de tocar el balón. No obstante, y una vez más, el UCAM CF acabaría sacando a relucir su casta por mediación de Jona, quien fue capaz de cazar un esférico rechazado en el área visitante y enviarlo de certero cabezazo al fondo de la portería para delirio de la parroquia azulona.
A partir de entonces, del minuto 25 de la segunda parte, lo que había sido un monólogo abrumador del Elche terminó difuminándose por completo y fueron los universitarios los que, comandados por un Nono omnipresente, parecieron pasar por encima de sus rivales para lanzarse en pos de la primera victoria en Segunda División. Así, Jona, Natalio y Vicente estarían a punto de lograr un segundo gol que ya no llegaría ni para los locales ni para los visitantes.