Kasabian, Iván Ferreiro, Carlos Sadness, Sidonie y Poolshake culminaron una gran jornada inicial del WARM UP
Foto: Kasabian
El WARM UP Festival se abrió en su nueva edición de este año estrenando nombre y con una productiva primera jornada que trajo al recinto indie de La Fica propuestas de altura y alguna que otra sorpresa.
Los cabezas de cartel del día, Kasabian, ofrecieron el concierto más esperado y rayaron sobre la media noche a la altura de un entregado público que abarrotaba el recinto y buscaba garra y diversión. Si de algo hacen gala los británicos es de ese contundente y lleno de energía guitarreo brit que no cesó durante su show.
Así, la banda de Tom Meighan ofreció un directo rompedor en el que supo amoldar las nuevas canciones de su reciente álbum For Crying Out Loud a su clásico sonido que les hizo reinar durante la década pasada y hacerlas ganar en vivo. Combinando el cocktail con clásicos como Underdog o Fire la fórmula solo podía salir triunfadora.
Antes del mencionado momento cumbre, la jornada había deparado ya muchos grandes momentos. Desde poco después de las 18h en que Modelo de Respuesta Polar y Lebowsky abrieron los escenarios Thunder Bitch y DFranklin la maquinaria ya estaba en marcha y el recinto empezaba a ser cada vez más concurrido.
Nosotros, hicimos la primera incursión para disfrutar con el gran crecimiento de los murcianos Nunatak, que demostraron en el Thunder Bitch que este año se han quitado el cartel de promesas para confirmar que son una de las realidades más solidas del indie nacional.
Foto: Nada Surf
Posteriormente, poco después de las 20h Carlos Sadness inauguraba el escenario Estrella de Levante con unos de los conciertos triunfadores del día que consiguió congregar a una numerosísima masa de espectadores.
A eso de las 21:15h en el escenario Thunder Bicht fue el turno de la primera banda internacional, Nada Surf. Los neoyorkinos dieron una sabia lección de veteranía con un sonido contundente de guitarras, y pese a algunos problemas en el sonido del escenario, que continuaron luego con Sidonie, solventaron la actuación con solvencia y una gran simpatía, sobre todo en las traducciones del bajista Daniel Lorca al cantante y guitarrista Mathew Caws. Al ser una hora, el show se movió bien con la presentación de algunos temas de su último trabajo You know who you are con sus clásicos, sobre todo de su exitoso albm Let Go, del que se cumplió recientemente su 15 aniversario y andan celebrándolo con una serie de conciertos este año.
Al mismo tiempo, en el escenario DFranklin Poolshake también convocaron a una nada despreciable legión a la que nos unimos en la última parte de su concierto para apreciar que ante escenarios más grandes el sonido pop de los murcianos tiene una envidiable proyección al alza.
Foto: Poolshake
Inmediatamente después asistimos a uno de los mejores conciertos que se le recuerdan por estas tierras a Iván Ferreiro en el que fue uno de los momentos que sin duda más quedarán en el recuerdo de esta edición. Sidonie, acto seguido, en un escenario Thunder Bitch que se quedó pequeño ante un recinto a rebosar puso a la gente a bailar al ritmo de, sobre todo, su último álbum El peor grupo de mundo. Se quitaron de sobra la espina de no poder asistir a última hora al festival y pusieron patas arriba La Fica en la recta final con su festivalera Carreteras infinitas.
Una vez que había terminado Kasabian, llegó el turno de El columpio asesino, que como bien dice su hit Toro ”hizo bailar toda la noche” al público a base de su mezcla de electrónica y rock, y a altas horas de la madrugada, aun habría tiempo para que llegara el turno para los amantes de la electrónica pura de la mano de The Bloody Beetroots y !!! (CHK CHK CHK) que cerraron una completa jornada del viernes.
Foto: Sidonie